Enrique es un inmigrante ilegal de origen español, dice que se metió en mi bolso cuando volví del viejo mundo porque está intentando equilibrar los movimientos migratorios. Es conciente de que sólo se trata de una utopía, así que mientras espera la llegada de más de sus compatriotas, en un intento por equilibrar ciertos micromundos, se alió al Mariscal Tito.
Enrique tiene problemas, vive colgado en general y se deja se deja, por eso todo termina siendo utópico para él. La gente de por acá le explicó que con el impulso de cruzar el mundo como polizón y cada tanto poner su firma en algún manifiesto, no alcanza. Le hablaron de actitud, de acción, de producir. Enrique dice que él va..., que algún día llegará y recién ahí verá adónde.
A Enrique lo pasan los días pero él sigue pensando que los días son pasados (pisados) por él. Enrique se excusa... se cuelga... se pierde...